¿Qué es un recibo y por qué razón no debes confundirlo con una factura?
El recibo, es un documento de entrega, o sea, un documento mercantil que justifica la entrega de un pedido.
Un recibo no es una factura y si bien tenga un aspecto y un contenido similares, no lo reemplaza. El recibo no cumple funciones tributarias, no es obligatorio, mas la factura sí lo es.
Para entregas continuas, puedes reunir múltiples recibos y al final producir una factura que recoja el conjunto de las operaciones.
¿Para qué vale el recibo?
El recibo se entrega con copia al comprador de las mercaderías a fin de que lo firme y pueda justificar la entrega. Su función, es la de dejar perseverancia de la entrega del producto.
El comprador se queda con el original y la copia firmada va para el vendedor. Es esencial que de esta forma sea, pues una vez el vendedor la haya recibido, va a poder producir la pertinente factura.
El recibo asimismo es esencial para la compañía que transporta la mercadería, ya el recibo firmado por el comprador es una garantía de entrega del producto en buen estado.
Por las precedentes razones el comprador debe asegurarse, ya antes de firmar nada, que el producto no está dañado. Y esto es esencial, pues muchas veces los transportistas al dar el producto solicitan al comprador que firme el recibo de una forma veloz sin haberle dado tiempo a revisar la mercadería entregada.
El inconveniente es que una vez firmado, la compañía de transporte, va a sostener que entregó la mercadería en estupendas condiciones.
¿Qué contenidos lleva el recibo?
En contraste a la factura, no hay una normativa que demande un contenido mínimo al recibo.
Unos contenidos mínimos para el recibo podrían ser los siguientes:
sitio y data de emisión del recibo
datos identificativos del comprador y el vendedor (nombre y apellidos o bien razón social, NIF o bien CIF, dirección postal, etcétera)
número de recibo
sitio y data de entrega
espacio para la firma del receptor (y, si se tercia, para el sello)
cantidad y descripción del producto
No es obligatorio señalar el costo de la mercadería o bien producto, puesto que la función del recibo es dejar perseverancia la entrega de uno o bien múltiples productos, no su valor comercial. Esa es la función de la factura.
Ahora bien, que no sea obligatorio no quiere decir que no se pueda apuntar, lo que pasa, es que a veces no interesa reflejarlo, por servirnos de un ejemplo cuando en las entregas de la mercadería es el fabricante el que la efectúa de forma directa al cliente del servicio final y de esta manera no puede saber qué coste marca el vendedor sobre su coste de fabricación.
Aspectos legales de los recibos
Que el recibo no sea obligatorio no quiere decir que no tenga relevancia legal y comercial. Debes tomar en consideración los próximos puntos:
la firma en el albarán: firmar el recibo significa no solo dar conformidad de que se ha recibido la mercadería, sino esta se ha entregado en buen estado. (p.e. al abrir un bulto la mercadería se halla en mal estado por el transporte, por el hecho de que ha recibido un golpe y no se escribe en el recibo esta circunstancia, el vendedor no va a poder demandar al transportistas ni el comprador al vendedor)
los plazos de pago: la ley de morosidad afirma que el plazo de pago de las facturas comienza a contar desde la data de recepción de la mercadería, no desde la data de emisión de la factura (que muchas empresas emiten exactamente el mismo día que mandan la mercadería) ni de recepción de esta
Como has podido leer los recibos son un documento fundamental.