Obviamente, en las crisis económicas existe una parte, la empresarial, que se ve de forma directa afectada. Las compañías en temporada de crisis o dificultades, no invierten dinero y comienzan, si pueden, a recortar plantilla.
Mas, los realmente afectados no son los empresarios, que asimismo porque se juegan su dinero, las víctimas son siempre los trabajadores, los asalariados. Los trabajadores de una empresa, que piensa hacer cierre o bien cortes de plantilla, se ven de una forma o bien otra perjudicados, así sea pues pierden su puesto de trabajo o bien pues las ventajas son mínimos y se rebaja su salario.
De ahí que, hoy en el weblog de temas legales, prestamos singular atención a los trabajadores que últimamente y muchos injustamente, han perdido su puesto.
Cuando una empresa, despide a un empleado, arguyen siempre y en todo momento una serie de motivos “aparentemente” legítimos o justos, en tanto que siempre y en todo momento o casi siempre y en toda circunstancia manipulan la información en pos de sus intereses. Por lo tanto, si quieren demostrar que el trabajador lo merecía lo van a hacer, quedando así, el empleado como un mal trabajador.
Mas lo cierto, es que muy frecuentemente no existen motivos de peso para despedir a esa persona, y por esta razón, debe ser el empleado el que haga saber tanto a los superiores como a sus compañeros lo que ha ocurrido, conforme su opinión.
Asesorar sobre de qué forma se debe afrontar un despido, es compliado, porque cada persona y cada trabajo es un mundo. Cuando el trabajador siente que su despido es injusto, debe comunicarlo a la compañía, a los directivos y después a los compañeros. Aclarar realmente bien lo qué tu has hecho, el trabajo y de qué forma te has sentido dentro de la empresa.
Además, debes meditar que cada trabajo es una experiencia y un aprendizaje y tal vez en esa empresa no han valorado o bien se han visto ” asustados” por tu nivel profesional y han preferido con argumentos, en ocasiones absurdos, prescindir de ti.
Está claro, que pensar y crear opinión no está bien visto en la escena laboral española, aunque de nosotros depende chillar bien alto que no somos máquinas.
Y si llega el temido momento y te dan la carta, ten en cuenta esto: Consejos al firmar la carta de despido
