Las agencias de ráting o de calificación crediticia se han puesto de tendencia, raro es el día que no aparecen en las noticias merced a su “facilidad” para desestabilizar economías nacionales. La Unión europea quiere regular su funcionamiento para que estén bajo su supervisión y no descarta la posible creación de una agencia pública europea para su control. Cuando escuchamos en las noticias que una agencia de ráting a recalificado la deuda de nuestro país a la baja, debemos tener claro que la financiación del Estado y de las empresas va a costar más y que en el momento de pedir un crédito puede resultar más bastante difícil que nos le concedan y más costoso. Las agencias de calificación crediticia son empresas que, por cuenta de un cliente, califican unos ciertos productos financieros o activos ya pertenezcan a empresas, estados o comunidades autónomas. Las notas resultantes valoran el riesgo de impago y el deterioro de la solvencia del emisor. Para llegar a ellas emplean una serie de modelos econométricos en los que usan diferentes variables como la deuda acumulada, lo que tardan en devolverla… que les sirven para valorar el potencial económico de aquel sujeto o bien entidad analizada. Sus conclusiones sirven para saber, por servirnos de un ejemplo, de si una inversión en un determinado producto financiero es peligrosa o bien no, examinando la posibilidad de que el inversor cobre los intereses y de que recupere el dinero una vez vencido el producto. Tres compañías neoyorquinas Standard & Poor´s, Moody´s y Fitch se reparten el noventa por ciento del mercado (oligopolio). Si bien cada una dispone de su propio sistema de calificaciones, estos son muy similares. Su credibilidad está ahora en duda, conforme los especialistas, a estas agencias en ciertos casos les interesa calificar a sus clientes del servicio con la nota máxima (AAA) para no perderlos, en tanto que si al usuario no le persuade la calificación puede no abonar sus servicios. Este era el caso de Lehman Brothers, cuando estalló la crisis financiera y destapó el escándalo su calificación para estas agencias de ráting era buena.